Fotografías: José Pampín

En el año 1997 se detecta la necesidad de implantar un hotel en lo que se trataba del área con mayor proyección a futuro en aquel entonces, con el comienzo del desarrollo del World Trade Center.

Dado que el vecindario que rodea a un hotel, generalmente tiene impacto sobre su status, su imagen, su clase, su estilo de operación y su capacidad de atraer y servir apropiadamente a su segmento particular del mercado, el Palladium Hotel en su ubicación central en la ciudad con abundantes servicios y excelentes accesos, cercana a la costa y considerada una de las zonas de mayor categoría, se volvió ideal para atraer a quienes llegan a la ciudad por negocios, pero sin dejar de lado una experiencia más turística.

El edificio en particular se desarrolla aprovechando al máximo un terreno en esquina de 434 metros cuadrados, que por su peculiar forma alargada de 45 metros de frente permite obtener la totalidad de las habitaciones y servicios del hotel con vista al frente, sobre el parque en que se implanta el World Trade Center y el complejo residencial Torres Náuticas.

El hotel fue diseñado considerando la comodidad y satisfacción del huésped (que lo propician los parámetros de diseño estético y estructural como la funcionalidad de la distribución del edificio) pero manteniendo el desarrollo dentro de los parámetros definidos por la factibilidad económica y teniendo en cuenta que el diseño es esencial para alcanzar óptimos resultados operativos.

El hotel fue diseñado de forma tal que cumpla con los estándares internacionales de un establecimiento de categoría "Cuatro Estrellas", y se desarrolla en 14 niveles (incluyendo planta baja y subsuelo) con una superficie total edificada de 4.000 metros cuadrados. Durante los primeros años fue parte de la cadena hotelera "Best Western".